El mundo de la construcción es uno de los ámbitos que más han evolucionado debido entre otras cosas al avance tecnológico y la consiguiente incorporación de herramientas y maquinaria especializada para desarrollar este tipo de trabajos.

Las máquinas de construcción son, como su propio nombre indica, útiles que han sido creados para llevar a cabo actividades de construcción, tales como excavaciones, transporte de materiales, carga y descarga, derribo de edificios, entre otras muchas utilidades.

Bajo este nombre de máquinas de construcción se encuadran una gran cantidad y variedad de aparatos que resulta muy complicado de enumerar y calificar a ciencia cierta, pero que poseen muchas características comunes.

Dentro de estas características podemos destacar las siguientes:

-Suelen ser máquinas de gran tamaño capaz de resistir grandes toneladas de peso.

-Suelen tener un sistema de tracción en todas sus ruedas lo cual le permita maniobrar sin problemas sobre suelos inestables.

-Son máquinas que para su uso es necesario un permiso o licencia especial.

– Son máquinas que han de ser usadas solo y exclusivamente para lo que han sido diseñadas.

Hay que tener en cuenta que las máquinas de construcción, además de ser un artilugio con un elevado coste económico, son máquinas en el que el menor fallo o imprecisión puede provocar graves riesgos, ya no solo para los trabajadores, sino para el personal que se encuentre cerca o en las inmediaciones de trabajo.

Por ello es imprescindible, ya no solo conocer el manejo y el funcionamiento de la maquinaria de construcción, sino además, hay que conocer el plan de prevención de riesgos laborales en este tipo de aparatos, ya que es esencial para desarrollar el trabajo en buenas condiciones y sin provocar riesgos inesperados.